viernes, 20 de noviembre de 2009

Vaya dos añazos más bien llevados!!!!

Así es caballeros y señoritas, ¡¡2 añazos!! Los que llevo con mi niña desde el 7 de noviembre.

Dos añetes que se han pasado volando entre besos, viajes: a Madrigalejo, a Mérida, a Miajadas, a Gijón, a Mazarrón, a Portugal... sí, viajamos más que el baúl de la Piquer (toma expresión cañí!). Mientras ella me recomendaba libros imprescindibles (sólo si no existe una peli del libro que sino pa' qué) y yo le obligaba a ver las pelis que me gustan (me muero y no te educo). Desde que estamos juntos hemos terminado una carrera (ella antes que yo, claro está), nos hemos ido a vivir juntos a Cáceres (gracias, Olga) y hemos ideado un régimen de visitas milimétricamente claculado para ver a nuestras respectivas familias y, a la vez, hacer todos esos viajes.

Y para celebrarlo nos fuimos juntitos al Jerte (es lo que se ve al fondo de la foto), a un pueblecito que se llama El Torno. Magnífico. Nos lo pasamos genial y estuvimos viendo desde gargantas invisibles a puestas de sol virtuales; todo ello aderezado con el encanto (el encanto era de verdad, ¿eh?) de la casita en la que nos quedábamos. También vimos otro pueblo que se llama Cabezabellosa con las casas que crecen de las piedras y van estrechando las calles hasta que no puedes dar la vuelta con el coche (era así de práctico el pueblecito), además, un avance arquitectónico-funcional en lo que respecta a la iglesia de esta localidad... ¡¡tenía el bar integrado!! Todo ello unido a un maratón de películas al calorcito de la esstufa y la bomba de calor, umm...

Ahora, de vuelta a la realidad, vamos a ver si nos sale algo de lo nuestro para ganarnos las habichuelas, aunque Cris ya es toda una curranta, por lo menos hasta dentro de un año. Si los niños o, mejor dicho, las madres de los niños no terminan con ella antes, jeje.

Como dice la canción "soy uno cuando estoy solo y dos si tú estás conmigo", menos mal que somos dos.